Definamos la palabra amor:
Amor se compone del prefijo a- y la palabra en latín -mors (cuyo significado es muerte). Es decir que «vivir con amor» equivale a «vivir sin muerte». (fuente: Marcheguiani.com.ar).
Vender es un acto de amor, por tanto, cuando vendemos, es necesario “poner a vivir” a nuestro cliente.
El amor tiene 3 componentes según Alex Rovira, que bien aplican , al acto de vender.
- Vender es “cuidar”. Esto significa, dedicar tiempo, tener esmero, generar una relación. Cuidar conlleva tener ciertas “renuncias”, que aunque molestas o extrañas, permiten que el acto de cuidar se exprese , se tangibilice y se valore.
- Vender es “inspirar”. Esto quiere decir, apoyar tu cliente , infundir en el un ánimo de grandeza, de buenos deseos, de esperanza. Generar en él un “nuevo aire”.
- Vender es “comprender”. Esto quiere decir, entender, atender y capturar completamente lo que escuchas y lo que sientes. Prestar atención, es decir, “estirarte” hacia el otro, literal.
Estos tres componentes , utilizados genuinamente, permiten tener un sentimiento de paz, y de tranquilidad, lo cual nos acerca al cierre de la venta, sin angustias, sin ansiedad y sin miedos.
Bien reza el conocido refrán:
“Al amor lo pintan ciego: Porque el que ama no suele ver los defectos de la otra persona”, en este caso tu cliente.
Y tú, ¿Sientes amor cuando vendes? ¿Realizas un acto de amor cuando estás con tu cliente, o simplemente lo haces por cerrar un negocio y ganar una comisión? ¿Vendes y sientes amor al hacerlo? ¿Renuncias a palabras disonantes, gestos desobligantes, porque cuidas a tu cliente? ¿Comprendes de verdad pa´Dios a tu cliente, y demuestras empatía para con él? ¿Al hablar con tu cliente , lo inspiras, lo motivas y le generas esperanza?