En general, con algunas excepciones , quienes estamos en ventas llegamos a esta profesión por mejorar los ingresos (ambición) , por azar, por “escampar”, porque tocó y no había nada más que hacer, o porque es “mejor esto que nada”, literalmente.
En algunas ocasiones, y con ayuda de un buen mentor y/o capacitador experto, el Vendedor descubre su propósito de vida, y lo pone al servicio de las ventas. La mayoría de las veces, y gracias al desconocimiento de esto, el Vendedor se da cuenta de la exigencia, el compromiso y la pasión que requiere vender, y pronto aborta su tarea.
Lo importante es descubrir el propósito – el para que vivimos- y desarrollar fortalezas que lo potencien, y que ayuden a mejorar la vida de otros – los clientes- y, la vida propia.
Ejemplos de abandono de la profesión de ventas hay en cantidades. Algunos porque les pagan mal, otros porque no están cómodos, la mayoría porque “están hartos de estar hartos” haciendo lo que les toca, y no para lo que nacieron (su don, su talento, su elemento, su propósito).
Cuando se hace lo que “toca hacer” , sin poner al servicio de lo que se hace nuestra “esencia”, seguramente entraremos a engrosar la lista de los que más pronto que tarde , abandonan la profesión ( En esta caso las ventas, pero aplica a cualquier actividad).
Ingenieros ( de todo tipo: civiles, mecánicos, de calidad, industriales, de materiales, biomédicos, químicos , etc), instrumentadores quirúrgicos, enfermeras, médicos, diseñadores gráficos, administradores, Abogados, arquitectos, marketeros desvergonzados – Seth Godin- contadores, entre otros miles, incursionan en la profesión y al final de la jornada, dicen: “estoy harto de estar harto, mejor me voy a hacer otra cosa”….
En conclusión no nacemos vendedores, sí con “ciertas” características que son de gran utilidad- nos hacemos sobre la marcha.
Sí este es su caso, es mejor que desde ya descubra su propósito de vida, su “esencia”, de lo contrario se convertirá en una estadística más, de personas que ingresaron a la profesión y que la abandonaron porque “están hartos de estar hartos”.
Y tú ¿Descubriste tu propósito de vida? ¿Lo pones al servicio de la profesión de ventas? ¿Eres competente para vender? ¿Tienes “ciertas” características que son sí o sí inherentes al Vendedor? ¿”Estas harto de estar harto”? ¿Estás en las ventas porque “toca” o porque te sientes feliz sirviendo y ayudando a otros? ¿Persigues la billetera de tu cliente unicamente ?