Esta expresión proviene del latín ‘Cum Romae fueritis, Romano vivite more’ (‘Cuando a Roma fueres, como romano vivieres’). (fuente: Google).
“Al cliente que atendieres, mejor has lo que vieres” ( La adaptación es de mi autoría). Significa que gracias a la diversidad , complejidad, heterogeneidad y singularidad de los seres humanos, los vendedores deben adaptarse completamente a la persona, y/o empresa que atienden.
Debido a la relación que se genera con un cliente, es un imperativo ser un “espejo” con el, habida cuenta de la importancia que tiene, construir una relación sentida, profunda y muy cómoda, lo cual sin duda, genera confianza total.
Vender es:
generar una relación e intercambiar valor.
Este intercambio de valor tiene varias caras: El económico, el emocional, el físico, el intelectual, el humano y en general, todo lo que nuestro cliente perciba como importante, bien sea para mejorar su bien estar o su desempeño.
El vendedor profesional, debe estar entrenado para aplicar a raja tabla este refrán:
” Al cliente que atendieres, mejor has lo que vieres”.
Esto aplica para el proceso completo de ventas: desde la entrevista, la indagación de necesidades, la presentación de la oferta, la solución de las objeciones y, por supuesto , el cierre de la venta.
Y tú, ¿Te adaptas a tu cliente? ¿Tienes la disposición de aplicar el refrán para hacer sentir cómodo tu cliente? ¿Utilizas el refrán en todo el proceso de la venta, incluso cuando te plantean objeciones? ¿ Tu proceso de adaptación es auténtico o impostado? ¿ Se nota que aplicas el refrán de corazón?